A partir de julio, el Aeropuerto Internacional de Querétaro (AIQ) estrenará una nueva ruta internacional directa a Los Ángeles, California, operada por Volaris con tres frecuencias por semana.
Esta adición responde a la creciente demanda de vuelos desde el Bajío hacia Estados Unidos y forma parte de una estrategia estatal para posicionar al AIQ como un punto clave de conexión aérea para el centro del país. La ruta se concretó gracias al potencial de viajeros detectado y el respaldo técnico del gobierno estatal.
Pero ahí no termina la apuesta. Las autoridades ya trabajan para sumar una nueva conexión internacional con destino a Panamá, a través de Copa Airlines, con el objetivo de convertir a Querétaro en una puerta de entrada a Centro y Sudamérica.

Esta conexión permitiría a los pasajeros evitar escalas innecesarias en otras ciudades como Miami, y facilitaría la movilidad hacia destinos estratégicos del cono sur. Actualmente se realiza un análisis de mercado y reuniones con ejecutivos de la aerolínea panameña para consolidar esta ruta.
A esta red de vuelos se suman otras rutas ya anunciadas, como el vuelo directo a Madrid, que operará Iberojet a partir de octubre con dos frecuencias semanales, así como la reciente incorporación de una ruta a Dallas vía Viva Aerobus.
También está en la mira una posible conexión recreativa con Las Vegas, actualmente en fase de estudio. Todas estas rutas forman parte de un plan integral que busca detonar el potencial turístico, económico y logístico del AIQ.

Actualmente, el aeropuerto queretano opera con solo el 10% de su capacidad, aunque cuenta con la infraestructura necesaria para realizar hasta 48 operaciones por hora. Tan solo en el primer trimestre de 2025, el AIQ movilizó a 162 mil pasajeros internacionales, lo que representa el 30% de su flujo total de viajeros.
Con estos nuevos vuelos, Querétaro consolida su papel como centro neurálgico de conectividad aérea en el Bajío, ampliando las opciones de viaje y fortaleciendo la proyección global del estado.