La falta de herramientas y conocimientos para criar a hijas e hijos se ha convertido en el principal detonante de conflictos familiares en Querétaro, advirtió Lucía Hernández Pinto, directora del Instituto Municipal de la Familia. En los casos más graves, estas diferencias llegan a provocar separaciones temporales o incluso el inicio de procesos de divorcio.
La funcionaria explicó que, después de los conflictos relacionados con la crianza, los problemas más comunes dentro del entorno familiar tienen que ver con la dinámica de pareja: infidelidades, falta de comunicación, estrés cotidiano y poca convivencia de calidad.
También destacó que muchas de las familias atendidas por el instituto provienen de otros estados del país, lo que implica adaptaciones que pueden generar tensiones adicionales, como la búsqueda de vivienda, empleo y nuevas redes sociales. Sin embargo, aseguró que estas circunstancias no representan una diferencia significativa en la incidencia de conflictos.
Hernández Pinto puntualizó que, hasta ahora, no se han detectado casos de violencia intrafamiliar dentro de los servicios brindados por el instituto. No obstante, subrayó que existen canales de apoyo y vinculación con otras instancias municipales como el DIF, la Secretaría de la Mujer y la Dirección de Atención a Víctimas, en caso de requerirse atención especializada.