La Asociación Queretana de Inmobiliarias (AQI) mantiene un diálogo constante con el Municipio de Querétaro para avanzar en una regulación que permita combatir empresas fraudulentas sin afectar el desarrollo del sector, informó su presidenta, Guadalupe Zarazúa Aguirre. El objetivo es construir un marco normativo que brinde mayor certeza tanto a compradores como a desarrolladores responsables.
Respecto a la propuesta municipal de crear un buró inmobiliario que concentre a empresas con denuncias por fraude, Zarazúa destacó que se ha planteado un enfoque más cuidadoso en la evaluación de cada caso, dada la complejidad y diversidad de los desarrolladores involucrados. La AQI subraya la importancia de evitar generalizaciones que puedan dañar la reputación de empresas legítimas.
Además de prevenir fraudes, las autoridades y el sector privado también analizan mecanismos para garantizar la calidad de las viviendas, incluyendo auditorías que identifiquen materiales deficientes o vicios ocultos. Estas medidas buscan proteger al consumidor, especialmente en casos donde no existen garantías claras de reparación o devolución.
Aunque todavía no hay una fecha definida para implementar un programa formal, existe apertura para que la iniciativa se extienda a otros municipios con alta actividad inmobiliaria, como El Marqués y Huimilpan. La AQI enfatiza que cualquier regulación debe evitar frenar la inversión o disparar los costos; actualmente, el sector prevé un crecimiento anual del 6%, con precios promedio entre 1.5 y 3 millones de pesos por vivienda.