“Como Roma y el Vaticano”, así definió el nuevo alcalde de Querétaro, Felifer Macías, a la nueva figura administrativa que ha creado en su gobierno: la Superintendencia del Centro Histórico, puesto que le quita facultades a la Delegación sobre la zona cultural de nuestra ciudad.
La idea es que este nuevo puesto se encargue de administrar temas como: seguridad, mantenimiento, comercio, eventos culturales, movilidad peatonal y vehicular, entre otros temas.
Las facultades de esta Superintendencia solamente serán en el perímetro de las avenidas: Circunvalación, Ezequiel Montes, Universidad y Zaragoza. De ahí en fuera, la Delegación Centro Histórico se encargará de las colonias que no pertenecen a la zona patrimonio cultural de la humanidad.
Si se preguntaban entonces: ¿quién será el nuevo Superintendente del Centro Histórico? Ese será el exregidor priísta Marco Álvarez Malo, quien tendrá ahora la responsabilidad de cuidar la zona más bonita, más turística y con mayor actividad económica del estado.
